El papel del CFO frente a los nuevos retos para las compañías

En los últimos años los CFOs han atravesado un período de cambios en distintas partes del mundo, dejando atrás su enfoque más centrado en las cuestiones financieras hacia una visión cada vez más vinculada al valor, adoptando una previsión estratégica en distintas áreas y habilidades con el objetivo de hacer crecer el negocio.

En este sentido, y ante la aparición de nuevos retos a nivel global, los líderes financieros deben enfrentar un espectro cada vez más grande de riesgos que no se ciñen únicamente a temas vinculados a lo económico, sino que abarcan problemáticas como el impacto ambiental, las amenazas digitales o la gestión de la cadena de suministros.

Frente a la incertidumbre económica del último tiempo, numerosas compañías han recurrido a sus directores financieros en búsqueda de asesoramiento frente a diferentes desafíos, con el objetivo de anticiparse y convertirlos en oportunidades en medio de un panorama en el que las empresas cambian velozmente.

De acuerdo a una encuesta realizada por BDO en 2024, el 60% de los líderes empresariales afirma que los riesgos para las organizaciones han ido en aumento en los últimos años. Al mismo tiempo, en comparación a lo sucedido en 2023, las compañías han tendido a adoptar modelos menos proactivos frente al avance de estos desafíos.

En este contexto, los CFO enfrentan mayores retos con el objetivo de proporcionar el soporte resiliente que las organizaciones necesitan y abarcar un amplio espectro de estos problemas potenciales.

Entre los principales riesgos para las organizaciones, la situación geopolítica y las diferentes tensiones producto de los conflictos globales han sido detallados como algunos de los puntos más mencionados por líderes financieros. En este sentido, es posible destacar los inconvenientes que generan estas cuestiones en la cadena de suministros y su posible impacto en las comunidades.

Por su parte, los avances tecnológicos y los acercamientos a los enfoques ESG han introducido nuevos retos vinculados a regulaciones y cumplimiento. Del mismo modo, las percepciones por parte de clientes y usuarios por el impacto social y ambiental de las compañías también crecieron en importancia.

A medida que estos puntos se transforman en elementos críticos de la gestión de riesgos, se requiere una labor proactiva que refuerce el crecimiento y la reputación de la empresa. Fortalecer habilidades como la comunicación, el desarrollo de estrategias de valor, la creación de informes y la medición de datos, son apartados fundamentales para los líderes financieros.

En el marco de esta evolución del CFO en torno a brindar un mayor asesoramiento estratégico relacionado a la resiliencia del negocio, la transformación digital y las habilidades que de ella se desprenden también ocupan un papel fundamental.

Ante estas cuestiones, y frente a la posibilidad de que las áreas financieras presentes en las compañías no cuenten con la disponibilidad o experiencia suficientes para hacer frente a los nuevos, será fundamental contar con equipos amplios e integrales para garantizar el éxito continuo de las organizaciones.