La actualidad de M&A y sus perspectivas a futuro 


La actividad de adquisiciones y fusiones (M&A) de las empresas ha sido muy cambiante en el último tiempo. A diferencia de lo que ha ocurrido en otras áreas, en los últimos años ha habido un crecimiento en comparación a lo ocurrido antes de la pandemia: las transacciones totales en 2021 y 2022 alcanzaron niveles récords.

Sin embargo, aunque sin llegar a las cifras anteriores a la crisis de COVID-19, durante el segundo semestre del último año se ha visto una caída en la cantidad de transacciones realizadas. En este sentido, la actividad que más ha decrecido fue precisamente la del capital privado que, a diferencia de los compradores comerciales, tuvo una baja del 40%.

En 2020 las transacciones vinculadas a este sector eran del 20%, en 2021 del 28% y en 2022 del 31%. Esta parte del mercado había sido una de las principales responsables de la suba general, pero la inflación y la volatilidad económica ha cortado la tendencia.

En tanto, la parte comercial también se vio afectada a corto plazo por la caída de las acciones en los mercados. En comparación a lo que había ocurrido durante el primer semestre, la baja más abrupta correspondió a Telecomunicaciones, Medios y Tecnología (TMT), seguido de los sectores de Ocio y Consumo e Industrias y Químicos.

En Estados Unidos, la caída en los valores de mercado creó una brecha entre las expectativas de compradores y vendedores, lo que repercutió en todo lo referente a M&A. Esto se suma a que los problemas económicos y la crisis geopolítica han generado un panorama de incertidumbre respecto cómo se desarrollará el área este año.

 

La situación en América Latina

Al igual de lo que ocurrió a nivel internacional, en Latinoamérica también se observó una gran caída en transacciones de M&A durante el segundo semestre de 2022. De hecho, el último trimestre ha tenido los valores más bajos desde 2020 tanto en volumen como en valor.

En este sentido, las transacciones de capitales privados han tenido un fuerte descenso desde el 25% en la primera parte del año pasado al 6% en la segunda.  En cuanto al mercado comercial, si bien la caída no fue tan notoria, tampoco se alcanzaron los números de 2021.

Teniendo en cuenta esto, entre las áreas más destacadas se encuentra TMT, Energía y Minería, y Servicios, que en su totalidad representaron más del 60% de la actividad. A su vez, también se puede destacar que la mitad de las 20 operaciones más importantes corresponden a Brasil.

Los altos porcentajes de inflación, las grandes tasas de interés, los precios mundiales de las materias primas y la incertidumbre a raíz de la inestabilidad política han marcado esta caída general en lo que respecta a fusiones y adquisiciones.

Debido a las situaciones descritas, se espera que el crecimiento en la región sea lento e inestable. En la actualidad, América Latina representa el 5% de la actividad mundial, lo que está representado en un total de 451 acuerdos anunciados o en curso.

De igual forma, a largo plazo, en el marco de las oportunidades surgidas a raíz de la competencia entre China y Estados Unidos, así como la tendencia mundial hacia la energía sustentable, varios sectores tienen la posibilidad de atraer inversiones extranjeras y aumentar sus perspectivas de crecimiento.

 

Hacia un futuro sostenible

Los problemas de 2022 han repercutido a su vez en todo lo que respecta a inversión de tecnología sostenible. A partir de esto se abre el panorama de cómo será el próximo período en este sentido, con una volatilidad económica que no parece disiparse en el futuro más cercano.

Avent Bezuidenhoudt, CEO de Earth Capital Ltd y exintegrante de BDO, aseguró que se continuará la línea de los últimos años respecto a la transición a una energía limpia, pero también se crecerá la esfera de seguridad y eficiencia de agua y alimentos. A partir de esto, argumentó además que una de las claves es seguir generando crecimiento continuo mientras se impulsa esta agenda en el capital privado.

Es importante también el desarrollo de políticas ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG) dentro de las organizaciones. Los esfuerzos internos para su desarrollo refuerzan la visión externa que se tiene de la empresa y previenen el desarrollo de discursos relacionados con el greenwashing.

En el futuro estas políticas serán cada vez más importantes en lo que refiere recepción de inversionistas y transacciones de fusiones y adquisiciones. Avances en este estilo abren las puertas a mitigar riesgos, aumentar los ingresos y potenciar el valor de las compañías.